El próximo día 5 de octubre a las ocho de la tarde tendrá lugar en el Museo Deu el acto inaugural de la exposición "Musa – Música", un conjunto de imágenes de la modelo Claudia Cascante hechas por el fotógrafo Linus Urpí en diferentes espacios de tres museos vendrellenses: Museo Deu, Museo Pau Casals y Museo Apel·les Fenosa.
La sala de las alfombras del Museo Deu, las escaleras del jardín de Vila Casals, las ventanas del Museo Fenosa, entre otros espacios museísticos … han sido el escenario donde ha puesto esta modelo para ser captada por la mirada del fotógrafo.
El acto inaugural en el Museo Deu contará con la presencia de Claudia Cascante, que hará una performance junto con el compositor, músico, actor y maestro Enric Rovira. También se presentará el catálogo editado por la Asociación Références a partir de la exposición de fotografías. Esta muestra se podrá visitar simultáneamente del 6 al 14 de octubre en los tres museos del Vendrell donde se tomaron las fotografías: Museo Deu, Museo Pau Casals y Museo Apel·les Fenosa.
La exposición nació a partir de una idea original del escultor Philippe Lavaill, en el que la modelo y el fotógrafo trabajan a partir de la escultura y de la música. Fue presentada por primera vez en la Mediateca Pompeu, en agosto de 2017, en el marco del Encuentro literario y musical de las dos Catalunyas que cada año tiene lugar dentro del Festival Pau Casals en Prada de Conflent, en la Cataluña del Norte .
Las personas que visiten las tres muestras entrarán en un sorteo de dos fotografías y dos catálogos (se dará un comprobante de las visitas).
Proyecto Musa- Música
En esta exposición, Claudia Cascante de Quadras, artista y modelo, musa del escultor Philippe Lavaill, ha querido invertir los roles. La modelo a partir de la cual el artista (pintor o escultor) crea o modela una obra, se convierte en actriz y se pone en escena. Desde la mirada del fotógrafo, Linus Urpí, propone un viaje por el cuerpo femenino e imagina posados que captarán la luz y que pondrán de relieve la elección del espacio, la estatuilla, la escultura, la joya o el instrumento musical.
A la inversa de Brassai, el cual transforma el cuerpo de la mujer en violonchelo, la exposición propone un juego (a veces erótico) entre el instrumento de música, la escultura que representa el músico o un lugar simbólico y el cuerpo femenino, el cual se entrega con toda su belleza al objetivo del fotógrafo. Ningún artificio suplementario perturba esta relación entre la musa y el fotógrafo. El blanco y negro acentúan las curvas del cuerpo entregado a su objetivo. "El puesto anula lo que la desnudez puede tener de escandaloso o de erótico", y da al espectador el placer de una descubierta plástica y musical.